Nos acercamos cada vez más a las épocas de frío, por lo que seguramente su boiler, más que en otras temporadas, tendrá un mayor uso. Ante tal uso intensivo es importante que se realicen algunos cuidados, ya que de no efectuarse puede este volverse defectuoso, algo para nada conveniente; además, recuerden que un calentador bien cuidado será mucho más eficiente y les ahorrará dinero en sus facturas de combustible. Con el fin de ayudarles, a continuación enlistaremos algunos tips que les serán de suma utilidad. Sin más que agregar, ¡Comencemos!
- Servicio anual
El servicio anual del calentador lo mantendrá funcionando en óptimas condiciones, con lo que tendrán agua caliente sin pausa alguna. Un técnico experto puede realizar ajustes en el funcionamiento del equipo para garantizar que no sólo funcione de forma segura, sino también de manera eficiente; asimismo, verificará que los componentes principales estén operando y le dará limpieza a las áreas accesibles. El servicio anual asegurará que su calentador esté listo para un uso más intenso en los meses de otoño e invierno.
- Radiadores
Cuando enciendan el boiler por primera vez, dejen que funcione un poco. Probablemente notarán que algunos de los radiadores no se calientan de inmediato y esto es a menudo porque hay aire en el radiador. Pueden saber si es aire porque el radiador estará caliente en la parte inferior y frío en la parte superior. Para resolver eso, sigan estos pasos:
- Consigan un paño viejo y una llave de radiador.
- Coloquen la llave en la válvula y gírenla suavemente durante un cuarto de vuelta, sosteniendo el paño debajo de la llave para atrapar el agua que se escape.
- Escucharán un silbido cuando el aire salga del radiador.
- Después de un rato, el silbido se detendrá y el agua comenzará a salir del radiador.
- Atrapen cualquier exceso de agua en la tela.
- Giren la llave del radiador en la dirección opuesta para cerrar la válvula.
- Verifiquen el radiador, que ahora debería estar caliente hasta la parte superior.
- Problemas comunes del radiador
- a) El radiador está caliente en la parte superior, pero no en la parte inferior. Esto se debe a que hay lodo en el radiador; tendrán que hacer que el sistema sea purgado.
- b) El radiador no se calienta en absoluto. Verifiquen que la válvula en la parte inferior del radiador esté abierta. Girará en el sentido de las agujas del reloj. Si está abierta y el radiador aún no se está calentando, esto podría significar un problema con la válvula. Si necesitan reemplazarla, les recomendamos que opte por una válvula termostática del radiador, ya que les permite ajustar la configuración de calor del radiador de acuerdo con sus necesidades.
- Equilibrar los radiadores
Este es un ejercicio bastante complicado, pero que vale la pena. Una vez que hayan purgado todos los radiadores, podrán notar que algunos son más cálidos que otros. Si ajustan suavemente los radiadores para que los realmente calientes estén a temperatura menor, entonces los más fríos deberían calentarse. En casas grandes esto es bastante difícil y puede que necesite ayuda de expertos.
- Comprobar la presión de las calderas
Una vez que la caldera esté funcionando, revisen el medidor de presión para asegurarse de que esté funcionando a los niveles de presión recomendados por el fabricante. Si la presión es baja, entonces pueden recargarla. Recuerden hacer esto con cuidado, ya que es muy fácil dañar una parte de la caldera llamada válvula de liberación de presión. Si esta parte está dañada, deberán llamar a un técnico para solucionar el problema.
- Compruebe si hay goteo en el tubo de desbordamiento de la caldera
Si gotea agua de la tubería de desbordamiento, esto podría significar que hay un problema con la caldera. Comúnmente, esto significa que la válvula de liberación de presión se ha vuelto defectuosa, esto podría deberse a un llenado excesivo de la caldera o simplemente, con el tiempo se ha desmejorado su capacidad. Deberán llamar a un experto para resolver este problema.
- Comprobar ventilación
Las calderas necesitan tener espacio alrededor de ellas para que estén adecuadamente ventiladas, por lo que deben asegurarse de que dondequiera que se encuentre, esté libre del desorden. Todos esos zapatos, bolsos y abrigos que suelen acomodarse a su alrededor deben retirarse para que la caldera pueda respirar adecuadamente. Si la caldera está alojada en una caja, asegúrense de que se pueda acceder a esta con un panel de acceso con el fin de que pueda mantenerse adecuadamente. Existen estrictos requisitos de ventilación y suelen encontrar en las instrucciones del fabricante.
- Comprobar que la chimenea sea accesible
De manera estándar, debe poder verse el conducto del equipo de manera que se puedan revisar las juntas, lo que significa que para cualquier conducto que desaparezca del techo o de un vacío, se deben instalar paneles de acceso. Esto es para su seguridad, sobre todo en los equipos que operan con gas, ya que puede liberarse monóxido de carbono sin que se detecte.
- Localicen una llama azul
Si la llama de su calentador es amarilla o naranja y no azul, llamen a un técnico de inmediato y soliciten que lo revisen. Una llama amarilla o naranja en una caldera puede significar que el equipo está defectuoso.
- No intente hacer reparaciones por su propia cuenta
Si hay un problema con su calentador, no lo abran e intenten arreglarlo ustedes mismos. Asegúrense siempre de que quien trabaje en su caldera sea personal calificado. Pidan al personal de servicio técnico que les muestre algún certificado que confirme su capacidad para reparar el equipo, esto es importante ya que de no tratarse de manera adecuada el problema que pueda haber, se pondrá en riesgo la seguridad de los usuarios.
Con lo dicho tendrán una serie de tips que les serán de suma utilidad para que su boiler se mantenga durante mucho tiempo en óptimas condiciones. Esperamos que les haya gustado esta publicación, no olviden contactar a nuestra firma H2OTEK, si su calentador está defectuoso y deseen reemplazarlo por alguno de los ejemplares que ponemos a su alcance. ¡Gracias por su visita!