Antes, entre las antiguas culturas, el ritual de la sauna era muy específico, donde dichas civilizaciones de daban más tiempo y valor al vapor para influir en el cuerpo. Eso ha venido cambiando, porque se ha comprobado que los circuitos de sanación con microciclos, son adecuados en varios sentidos, empezando por el tiempo, donde la gente cada vez se ve más limitada por ello, debido al trabajo y otras obligaciones diarias. Pero la ventaja más palpable de estos microciclos de sanación, atañen a la efectividad sanativa que se nota en el cuerpo humano, ya sea en niveles físicos y mentales.
Por ello, la moda de los rituales de hidroterapia en estaciones calientes y frías, son las más empleadas actualmente. Las propiedades curativas y relajantes de los spas y esta clase de circuitos, mejoran sustancialmente la vida de aquellas personas en constante estrés, así que por lo menos, se recomienda intentar un ritual de baño de vapor, cuando menos para ayudarse uno mismo a dar la tranquilidad que necesita el cuerpo, al menos por un momento.
Vapor para baño dentro de un circuito sanador a través de las propiedades del agua
El hogar se puede configurar para todo un circuito de sanación, y las ideas se pueden tomar de los spas más lujosos y asertivos, en el tema de los microciclos de tranquilidad y relajación corporal-mental. Por ejemplo, el recinto de vapor, puede ir adecuado con ciertos detalles que ayuden a estimular aún más los poros para sacar todas las toxinas acumuladas en días. Se dice que una superficie de mármol que cubra al recinto, puede ser una gran idea para percibir mejor el vaho sanador.
Luego, también se podría emplazar una sauna seca tipo finlandesa, con elementos de pino para una sensación más natural, y con una vista que denote tranquilidad y relajación. En cuanto a las duchas a presión, servirá para enfriar el cuerpo después de haber estado en un recinto caluroso vaporoso; el agua a presión sirve mucho para relajar ciertas partes del cuerpo que han estado expuestas al calor, como la espalda superior y los hombros, como si se tratase de un masaje con agua.
La piscina es igual de relevante en un circuito de sanación, la cual puede estar configurada para 6 estaciones o microciclos para distintas partes del cuerpo, como hombros, espalda alta y baja, pies, piernas, y demás. Asimismo, el jacuzzi es excelente para la relajación, sobre todo cuando las burbujas hacen contacto directo con la piel, en una sensación única.
Y por último en un circuito sanador, la alberca con agua fría. Esta área energizará la piel, revitalizando todo el cuerpo. Es precisamente el choque de calor-frío y viceversa, lo que mejora el sistema circulatorio, beneficiando a todas las partes del cuerpo.
Circuitos de 25 minutos con vapor para baño
Básicamente son microciclos de relajación, que no deben superar los 25 minutos. Estos se alternan entre el recinto de vapor, sauna o jacuzzi de 10 minutos. Inmediatamente viene la ducha a presión con agua tibia, que no debe superar los 2 minutos. Luego vienen 3 minutos de reposo con hidratación oral. Para culminar, se debe pasar a la piscina de 6 etapas para revitalizar.
Circuitos de 40 minutos para calmar y serenar la mente con vapor para baño e hidroterapias
Esta clase de ciclos son ideales para personas que se pueden relajar por más tiempo. La sala de vapor o sauna deben juntar 10 minutos, alberca fría de no más de 3 a 5 segundos, hidratación de 5 minutos -los mismos para el jacuzzi-, minuto y medio de agua templada, 5 minutos de reposo e hidratación, para terminar con 10 minutos de piscina con sus 6 etapas o ciclos.
Circuitos sanadores de una hora
Es básicamente como el anterior, solo que ahora tendrán que ser 10 minutos de vapor para baño y 10 de sauna seca, asegurándose que, en el intervalo, el cuerpo esté completamente seco antes de ingresar a la sauna. 10 minutos de jacuzzi, 5 minutos de reposo con un snack -preferiblemente fruta- y todo lo demás es prácticamente igual.