Uso de deshumidificador para contrarrestar el mal sellado de ventanas y muros
Muchas veces nos enfermamos sin saber la verdadera razón, y dichas afecciones no tienen por qué ser intensas, pero sí frecuentes, como si de repente se desarrollara una enfermedad crónica que nos molesta a todas horas, e incluso por más medicamento que tomemos, el problema persiste aún más. En ese sentido, es posible que estemos lidiando con alguna clase de contaminación interna, como un moho negro tóxico que ni siquiera hemos sido capaces de verlo.
El moho negro tóxico en un hongo que presenta altos riesgos para la salud humana, y que al aspirarlo por el oxígeno que nos rodea en el hogar, pues como mínimo, va deteriorando el sistema inmune, poco a poco, haciéndonos más susceptibles a bacterias y virus, como el COVID-19, un asunto de salud pública que seguirá por mucho tiempo. Lo más grave, es que estas esporas negras, pueden dañarnos a un nivel neuronal y físico, de no tratarse adecuadamente.
Si tenemos funcionando el sistema de climatización con función de humidificación, tal vez lo más sensato es dosificar la potencia del dispositivo, no importando la estación del año en que nos encontremos, porque en verano es normal que se prenda el aire acondicionado con humidificador, para contrarrestar calor y sequedad, pero también en invierno, al encender la calefacción, estamos propensos a usar sistemas de humidificación, para evitar la sequedad del calefactor, lo que llevaría a picos de humedad importantes. Asimismo, durante el invierno, se puede presentar un frío húmedo, por algunas precipitaciones, lo que es riesgoso para la proliferación de hongos en rincones insospechados de la casa. Es necesario tener un deshumidificador portátil o fijo, para evitar esas condensaciones.
Ahora, también esas condensaciones resultan muy dañinas para ventanas o domos con un sellado inadecuado, ya que esa saturación atmosférica, invariablemente afectará los marcos o el área circundante, y visiblemente se apreciará una mancha negra por la estructura que rodea a ventanas y puertas. Cuando se note una leve condensación en los cristales, es momento de emplear una deshumidificación, para tener controlada esa humedad que puede dañar la madera y el mismo yeso, mencionando el hecho claro está, de la proliferación de un eventual moho negro tóxico.
Cuando existe esta clase de problemas por toda la casa, entonces lo que se aconseja es utilizar un deshumidificador portátil para tratar de abarcar todos los rincones de la vivienda, moviendo dicho dispositivo de ventana en ventana, para desaparecer la amenaza de humedad que se pudiera estar produciendo. El mismo dispositivo portátil para deshumidificación, es de gran utilidad para llegar a esos rincones y recovecos que son difíciles, donde se suelen originar todo tipo de hongos, incluyendo el moho negro tóxico.
También pueden existir problemas de drenaje, que atentan contra la estructura de un edificio, empezando por afuera, e incidiendo adentro de manera eventual. Es preponderante checar muy bien alcantarillas y demás salidas de agua, en jardines, patios, balcones y en la misma azotea de la casa. Donde veamos problemas de estancamiento de agua, es necesario llamar al fontanero o a un experto y a su vez, disponer de un deshumidificador bien empotrado en muros donde existen dichas incidencias, para mitigar los efectos de saturación atmosférica, microorganismos y demás cuestiones, en el yeso y mampostería del hogar.
Moho negro tóxico en espacios reducidos en baños y áreas comunes. Dichos microorganismos suelen generarse en recovecos que no están a simple vista, por una alta condensación, donde los baños son los que más resultan dañados. No tratar este problema a tiempo, hará que en cuestión de días, el techo o muro del baño se tapice con el hongo tóxico, derivado de la excesiva humedad. Por ello, hay que tener un buen extractor en el baño o en su defecto, deshumidificadores para mantener la condensación controlada. Lo mismo pasa con los azulejos, que de no limpiarlos con regularidad, podrían radicar cualquier tipo de moho, llegando incluso a penetrar en lo profundo del yeso, forzándonos a una remoción de mosaicos y su posterior reemplazo.
Si queremos evitar hacer un reemplazo de mampostería y yeso en muros y techos de la casa, habrá que prevenir los daños por humedad, con una buena ventilación y un buen desecante.
Hay que recordar que los adultos mayores, niños pequeños y personas con sistema inmune débil, son los más propensos a este tipo de microrganismos, por lo que debemos tener cuidado en todo momento. Inclusive los animalitos y mascotas que tenemos, pueden presentar afecciones de piel, que son más comunes en perros.